Reinversión en desarrollo y tecnología de punta para lectura OIT de rayos X

Se optimiza lectura e informe de rayos X de tórax con estándar OIT

CMT profundiza su camino en la innovación estratégica, tecnologizando y optimizando procesos a través de desarrollos propios e integraciones de plataformas, que les permiten estar a la vanguardia y entregar un servicio de excelencia a sus clientes y pacientes

La propuesta de valor de Centro Médico del Trabajador (CMT) está ligada, desde su origen, a permanentemente estudiar sus procesos en búsqueda de optimizarlos – a través de la tecnología e innovación – en beneficio de sus clientes. En esta línea, CMT acaba de actualizar sus equipos de rayos X digitales – operados por tecnólogos capacitados en dicha norma – y el sistema de informe de dichos exámenes, asociados a la lectura de radiografías en base a la clasificación OIT que realizan médicos especialmente certificados.  “Lo que hicimos fue digitalizar el proceso de lectura de este informe, permitiendo centralizarlo en la plataforma articulada por nosotros y agilizar y optimizar cómo los médicos lectores OIT realizan estos informes estandarizados, apegándose a la norma”, explica Cristián Arancibia jefe de TI y Transformación Digital.

La lectura radiográfica mediante la clasificación OIT es una técnica muy utilizada en el mundo, que en Chile se aplica – hace una década- como tamizaje inicial en la vigilancia de la silicosis, un tipo de neumoconiosis que afecta a los trabajadores expuestos a partículas de sílice, materia aún presente en una diversidad de rubros, entre los cuales destacan la minería y construcción, ámbitos en que se desempeñan muchas de las empresas que integran nuestra cartera de clientes. 

De acuerdo a la guía desarrollada por la OIT, y actualizada para la clasificación a las imágenes radiográficas digitales del tórax, ofrece un medio para describir y registrar sistemáticamente las anormalidades radiográficas del tórax provocadas por inhalación de polvo. Nuestro director médico nacional, doctor Fernando Peñafiel, explica que, en síntesis, la lectura OIT implica que los equipos tienen que tener cierta certificación, los técnicos que toman la radiografía tienen que tener, también, certificación y el médico lector tiene que contar con una certificación actualizada y actuar siguiendo una serie de etapas estandarizadas. 

Una vez que el médico se enfrenta a la radiografía de tórax, primero tiene que analizar la calidad de la técnica de la imagen (que va del 1 al 4, desde perfectamente tomada a necesitar repetirla por la calidad de la imagen registrada, asociada a la forma en que se tomó). En segundo lugar, debe especificar la profusión – lo más relevante en la lectura OIT, – que implica pesquisar pequeñas imágenes granulares radio-opacas, que serían los primeros indicios para sospechar de una enfermedad por neumoconiosis y que deben, luego, descartarse con un TAC de tórax de alta resolución sin contraste. Luego, debe especificar las alteraciones de estructuras adyacentes al pulmón, como por ejemplo la pleura, donde puede haber engrosamientos pleurales difusos o en algún segmento que podría hacer sospechar una neumoconiosis y, finalmente, concluir si es que hay o no sospecha de neumoconiosis en el paciente. 

Las ventajas que ofrece la nueva plataforma de registro de radiografías con lectura OIT implementada por CMT son varias. “Primero, nos permite unificar todas las radiografías en una única plataforma, lo cual simplifica todos los procesos desde la lectura, en que nuestros médicos certificados pueden ingresar a esta plataforma y seleccionar los exámenes que se han cargado a nivel nacional, lo que antes debía hacerse por cada sucursal. Esto acelera ese paso, porque al ingresar a la plataforma ven toda la masa de rayos disponibles para informar”, explica el doctor Peñafiel. 

Junto con ello, el tiempo de lectura disminuye. “Un médico experto no debería tomar más de cinco minutos, proceso que se ralentiza al tener que tipear los datos en el informe. Por ello, también creamos una forma de informarlos en base a un click, simplemente, para facilitar y hacer más eficiente en relación al tiempo la lectura”, dice. 

Finalmente explica que “otra ventaja de esto es que estamos en proceso, de que, en el corto plazo, la lectura que realiza el médico radiólogo sobre un informe OIT se cargue de manera automática en nuestra ficha clínica electrónica. En la actualidad el médico evaluador ingresa a esta plataforma, baja los informes que ya están realizados por los lectores OIT y él es el que los tiene que cargar a dicho sistema, pero pronto esperamos que eso sea un proceso que se realice de forma automática”, concluye el doctor Peñafiel.